El ministro de economía presenció reuniones con diversos fondos de inversión, en su visita a Nueva York. Martín Guzmán afirmó que las metas de crecimiento y de déficit fiscal que figuran en el Presupuesto Nacional presentado el año pasado, serán sustancialmente mejoradas. Según el ministro, Argentina crecería este año casi 7% (no ya 5%) y el déficit fiscal se ubicaría por debajo del 3% (en lugar del 4,5% del PBI). Este último valor se obtendría gracias a una mejora en la recaudación impositiva de más de 10 puntos por encima de la inflación, proceso que se viene registrando desde diciembre del año pasado. La estrategia de Guzmán en Nueva York se basó, básicamente, en no justificar la caída, sino en mostrar que los números de la Argentina del 2021 sorprenderán para bien, y que para el 2022 comenzará una nueva etapa de crecimiento sostenido.
Recordemos que otro objetivo que persigue el gobierno, planteado en el Presupuesto Nacional, es una inflación del 29,0% para todo el año 2021. Consultoras privadas sostienen que, después de un comienzo de año complicado en el tema, la suba de precios podría empezar a ceder a partir de abril. Según el cálculo del IPC para GBA, la suba de precios alcanzó 3,3% en la primera mitad de marzo -comparado con la primera mitad de febrero- y rondaría 3,7% en el mes, totalizando cerca de 12% el acumulado para el primer trimestre del 2021.
Entonces, con estos números, la inflación mensual debería promediar 1,7% entre los meses de abril y diciembre para poder cumplir la meta oficial del 29%. Pero, considerando lo complejo del proceso desinflacionario, ya nos atreveríamos a decir que ese objetivo queda desdibujado.
Por lo tanto, a pesar del arranque caliente de la inflación en 2021, es probable que la misma se desacelere en los próximos meses, especialmente cerca del período electoral. Sin embargo, como la suba de precios no perforará por debajo del 2% mensual en todo este año, el objetivo del Presupuesto quedará cada vez más lejos. Por otro lado, vale comentar que la baja no será sostenible, ¿por qué? Bueno, porque luego de las elecciones, es probable que tanto las tarifas de servicios públicos como el tipo de cambio oficial aceleren su marcha, tirando para atrás el camino ganado en los meses anteriores, osea entre abril-octubre. De esta forma, la suba de precios acumularía cerca de 40% en 2021, y dejando atrasos pendientes para 2022.
Volviendo a los dichos del ministro de economía en Nueva York, dijo que las reservas reales aumentarían este año casi u$s6.000 millones, y que no había alteraciones cambiarias. En cuanto a la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo que continuaría en el tiempo y que no hay motivos para determinar que no habrá acuerdo final, aunque hoy no se pueda determinar el momento. Y cuando todo este panorama se consolide, los títulos públicos de la deuda argentina volverían a cotizar como un bono emitido luego de una reestructuración de deuda, y no como hoy en niveles de default.
El día martes el INDEC dará a conocer el nivel de actividad al cuarto trimestre del año 2020. Con esos datos sabremos cómo finalizó el 2020, un año tan atípico, atravesado por la pandemia de COVID, y con qué números entramos en el año 2021.
En el día de hoy, el ministerio de economía dará a conocer el resultado fiscal al segundo mes del año 2021, conoceremos si febrero repetirá la situación de superávit fiscal de enero, superávit fiscal mensual que no se veía desde octubre del 2019.
El día jueves conoceremos los indicadores del mercado de trabajo, tasas e indicadores socioeconómicos también al cuarto trimestre de 2020, para, en este caso, conocer la situación del mercado laboral post pandemia.
Y por último, el INDEC dará a conocer los datos de las ventas en supermercados minoristas, mayoristas y centros de compra, al primer mes del año 2021, para conocer un poquito mejor cómo comenzó el consumo durante el año 2021.
por Julieta Colella
Galería de imágenes
Comentarios