Juntos por el Cambio no dejó una buena imagen de gobierno. Sin embargo, con un año y medio de pandemia encima con sus muertos y sus asustados y todo lo que se agravaron las cosas en la producción, en el empleo, en la capacidad de consumo y en tantos otros aspectos de la vida real de las personas, la coalición opositora logró que una interna por los puestos de los dirigentes se vuelva interesante. Y no es poco que la política cumpla su función mínima de canalizar tensiones. Resulta tranquilizador descubrir que el abismo sigue estando a distancia prudencial y la sangre no va a llegar al río.
Dentro de dos semanas y media cierran las listas para las PASO del 12 de septiembre. Es la antesala de una elección parlamentaria de medio término, pero la verdadera obsesión es 2023. Dicen que no, que las presidenciales quedan lejos, tratando de evitar un espectáculo pornográfico al borde de las tumbas. Pero la verdadera obsesión –que, por cierto, unifica a los opositores y los oficialistas- es 2023.
Daniel Lipovetsky es un moderado dentro del PRO. Tan moderado que, a veces, no parece del PRO. Le pedí que analizara conmigo el panorama de los principales referentes. Les comparto un fragmento de la entrevista para mi programa digital “En el barro”…
-¿Le hizo bien a la política que Patricia Bullrich se bajara de su candidatura y le abriera paso a María Eugenia Vidal en la Capital Federal, desde la provincia?
-A la política no sé; al especio político nuestro, seguramente que sí. Porque, por supuesto, si puede haber listas de consenso, siempre es mejor. Evitamos, más allá de que las PASO, que pueden fortalecer los espacios políticos, generen heridas que después hay que curar. Que haya una loiusta de unidad en la Ciudad de Buenos Aires, que además es un distrito que gobernamos, es una buena decisión. Aparte, el de Patricia ya es un rol nacional. Es la presidenta del PRO, no era una candidata que venía haciendo política solamente en el distrito. Venía haciendo muy bien durante todo el año pasado su construcción nacional desde el partido y eso la va a seguir potenciando.
-¿La ves presidenta de la Nación?
-La veo con posibilidad de poder dar la disputa. Por supuesto que, en este marco, prefiero a Horacio Rodríguez Larreta, con quien fui funcionario…, yo fui secretario de Derechos Humanos dependiendo de él cuando era Jefe de Gabinete de Mauricio Macri…, lo conozco mucho, trabajé mucho con él, sé cómo trabaja, sé cuánto valora la gestión pero también las construcciones políticas y conozco sus ideas de amplitud. Creo que la Argentina va a necesitar candidatos que sean amplios y creo que Horacio es un gran candidato. Por supuesto, después veremos quién llega mejor posicionado en 2023.
-Horacio. Patricia. ¿El liderazgo de Macri ya fue?
-No, porque el liderazgo de Mauricio Macri es un liderazgo que va a estar siempre en nuestro espacio porque es el fundador del PRO. Hay algo que, independientemente de sus cualidades electorales, es un dirigente que la historia va a valorar mucho más de lo que se lo valora hoy, porque es alguien que vino de afuera de la política, fundó un partido, rompió el bipartidismo, fue Jefe de Gobierno, fue Presidente rompiendo la tradición bipartidista, logró terminar un mandato de cuatro años encabezando un gobierno no peronista. Esas cosas son históricas pensando en un dirigente en particular. Claro que su gobierno merece recibir críticas, porque si hubiera gobernado bien habríamos ganado. Pero hay que ponerlo en el lugar de un dirigente de alto kilaje… En cuanto a sus valores, digo kilaje… Y en ese marco, tenemos que valorarlo, darle el lugar que corresponde, más allá de que sea o no candidato él. Tenemos que aprovecharlo. Casi ninguna fuerza política hoy tiene dentro de su espacio a un expresidente. Y eso no podemos negarlo ni no usarlo, en el buen sentido. Lo de las candidaturas va por otro lado. Pero el liderazgo de Mauricio siempre va a estar entre nosotros, por su propia fortaleza y su propia historia, independientemente de que el candidato sea otro.
-¿No lo ves presidente de nuevo?
-Es una decisión que tiene que tomar él. Hoy, por sus declaraciones, no pareciera estar con esa expectativa. Me parece que él, como ha dicho, está para fortalecer a otros dirigentes de nuestro espacio. Incluso dijo que, ahora, no va a tomar partido por ninguno. Creo que él tiene que dedicarse eso, ése es su rol. Después, cuando llegue el 2023… Falta tanto para el 2023… Veremos cómo está la Argentina y cuál es el mejor candidato. Si es alguien que ya tuvo la experiencia de ser presidente, como él, o va a haber cierta renovación. Yo soy de la idea de que siempre los electorados expresan la necesidad de renovación y expectativas de cambio. En ese marco, tenemos dirigentes que representan los valores de Juntos por el Cambio, que ya sabemos cuáles son: cierta institucionalidad, cierta normalidad en la manera de gobernar, y también tenemos a quienes representan esa idea de renovación mejor que Mauricio, que ya tuvo la posibilidad de ser presidente.
Así que, bueno, ya saben: hasta dentro del PRO sostienen que, si todo sale muy pero muy mal, ahí está Mauricio Macri para volver.
por Edi Zunino
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