Desde que apareció la televisión hasta estos días de explosión digital permanente, la radio fue el medio tecnológico más veces condenado a muerte. Claro que el problema central de predecir el futuro suele estar en las millones y millones de voluntades diversas que juegan el juego de la vida, la información, el entretenimiento y el consumo. Digo esto a cuento de un informe de la consultora Proyección recién salido que nos presenta un dato duro relevante: dos de cada tres personas escuchan radio en la Ciudad de Buenos Aires, el Conurbano y las grandes ciudades del interior bonaerense.
En términos generales, esas audiencias están compuestas mayoritariamente, aunque no con una contundencia apabullante, por varones adultos con un nivel educativo medio/alto. En CABA tiene mayor peso “estar informado” como principal motivo de encendido, mientras que en el GBA y el interior se valora más el “sentirse acompañado y distraerse”.
En CABA son más los oyentes que se conectan desde plataformas digitales. En GBA, son más los que escuchan en el auto. Y en el interior provincial siguen pesando más los equipos de radio más tradicionales. Esto viene determinando las nuevas estrategias de las radios porteñas, que, con nuevos formatos en sus programaciones, están explorando la transmisión audiovisual por YouTube o Facebook o hasta vivos de Instagram con la intención de captar audiencias más atentas al cambio tecnológico, replicando las transmisiones o generando contenido específico que ni siquiera pasa por el aire de la radio.
A mayor edad, mayor escucha de radio. El 44,8% de los jóvenes entre 16 y 24 años escucha radio; pero solo el 13% lo hace a diario. Entre los 25 y 34 años, el 59,3% escucha radio y un 25,3% lo hace todos los días. Entre los 35 y 54, la audiencia asciende a 69,8%, con un 40,8% de escuchas permanentes. El 73,3% de los mayores de 55 años escucha radio y el 54,8% lo hace a diario.
El público exclusivo de AM crece a mayor edad, representando el 24,8% de los mayores de 55 años. Con la FM se invierte la tendencia y el público exclusivo se ubica mayormente entre los 25 y 54 años. En cuanto a la forma de escucha, a mayor edad se presenta mayor uso de equipo de radio y menor uso de plataformas digitales. El 34,2% de los jóvenes entre 16 y 24 escucha radio sobre todo a través de internet.
Entre las razones apuntadas por las personas que no escuchan radio, la más importante es la falta de tiempo y de formas o dispositivos para escuchar. Sin embargo, se destaca que en el segmento más joven –que es el más numeroso entre los no-escuchas- la falta de interés y gusto por los contenidos del medio se presentan como muy relevantes en el trabajo de la consultora Proyección. Esto explicaría los problemas de la radio para penetrar en audiencias por debajo de los 40 años: los contenidos no le hablan a ese segmento, no están pensados para ellos ni buscan adaptarse a sus demandas ni gustos. Esto debe entenderse en una evolución histórica donde la radio siempre fue un medio pensado y diagramado para audiencias más bien adultas, con una rutina más bien armada y, sobre todo, con una capacidad de consumo que justifique la inversión publicitaria de los anunciantes.
En cuanto al horario de mayor encendido, es el de media mañana, entre las 9 y las 12, aunque en Capital Federal y GBA las audiencias se despiertan más temprano para acompañar con información el arranque del día.
Las mediciones merecen un párrafo aparte. Hay radios y repetidoras de radios en todo el país, y el alcance vía internet por plataformas y aplicaciones tampoco tiene todavía métodos generales de cuantificación.
Pero bueno, la cuestión es que la radio vive.
por Edi Zunino
Galería de imágenes
Comentarios