El INDEC dio a conocer el índice de salarios al cuarto trimestre del año. En abril, los salarios del sector privado registrado, en promedio, variaron positivamente un 38,1% respecto a abril del año pasado. En abril del 2020 los salarios del sector privado en promedio le habían ganado a la inflación. Habían variado anualmente un 47,7%, mientras que la inflación anual había sido del 45,6%. Esto no ocurría desde mayo del 2020, alcanzando una brecha máxima durante febrero de este año, cuando los salarios del sector privado habían crecido tan solo un 29,4% frente a una inflación anual del 40,7%. Claramente abril no fue la excepción, y los salarios tampoco le ganaron a la inflación ubicándose 8,2 puntos porcentuales por debajo.
Para el caso de los salarios del sector público, la variación interanual a abril fue del 33,1%, la más alta de los últimos 9 meses, cuando venían creciendo a una tasa promedio del 27,0/28,0%. Desde diciembre 2017, momento a partir del cual el INDEC informa datos anuales de la inflación, no hay registro que la variación interanual de los salarios del sector público le haya ganado a la inflación. En el último año, la mayor diferencia entre ambas variaciones se dio durante el mes de julio del 2020, cuando los salarios del sector público crecieron en promedio un 28,9%, y la inflación ascendía a 42,4%. Nuevamente, abril no es la excepción. La variación interanual de los salarios del sector público, en promedio, se ubicó 13,2 puntos porcentuales por debajo de la inflación. Recordemos que en abril la inflación anual fue del 46,3%, la más alta de los últimos 12 meses.
Y, por último, los salarios del sector privado no registrado, es decir el salario de todos aquellos que están inmersos en la economía informal de nuestro país, que lamentablemente cada vez es mayor. En este caso, si bien también se ubica por debajo de la inflación, es la variación que más se aproxima a la inflación. En promedio, el salario del sector privado no registrado varió interanualmente un 38,4%, la mayor variación desde que comenzó el año, ya que desde enero a abril la variación interanual de este tipo de salarios ha ido en aumento. En este caso, no solo que fue el tipo de salario que más cerca estuvo de la inflación, sino que fue el único que le ganó la carrera a la inflación, durante 4 de los últimos 12 meses, más específicamente durante los meses de septiembre, octubre, noviembre y diciembre del 2020.
Para hablar de promedios, cuando en los últimos 12 meses la inflación anual se ubicó en el 40,3%, los salarios del sector no registrado variaron 37,1%, los salarios privados crecieron en un 34,1%, y los públicos 29,7%.
Si el promedio lo llevamos a los últimos 4 meses, es decir desde que comenzó el año a abril, el promedio de la inflación anual aumenta al 42,0%, el del no registrado a 37,2%, el del sector privado cae al 31,9%. Mientras que el del sector público se mantiene inalterado, es decir tiene el mismo promedio para los últimos 12 o 4 meses.
Si bien una de las promesas del gobierno, cuando presentó el presupuesto nacional el año pasado, era que los salarios iban a ganarle a la inflación durante el año 2021, los números y la realidad nos están demostrando que estamos lejos de que así sea. De todas formas, no deberíamos descartar una aceleración de los salarios para arriba a medida que nos vamos acercando a las elecciones. El gobierno tiene muy pocas cartas para jugar en estas elecciones de medio término, es la primera vez que un gobierno peronista llega a unas elecciones con estos niveles de inflación y es muy probable que le juegue una mala pasada.
por Julieta Colella
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