Wednesday 18 de September de 2024
Perfil

La impactante quema de un millón y medio de libros en plena dictadura militar

PODCASTS | Por Radio Perfil | 30 de August 15:37

Las 24 toneladas de libros y fascículos correspondían a ejemplares del Centro Editor de América Latina y fueron incinerados en un terreno baldío de Sarandí.

El Centro Editor de América Latina, conocido como CEAL, fue una editorial argentina fundada en 1966 por Boris Spivacow (ES-PI-VA-COF).

Primer gerente de la Editorial de la Universidad de Buenos Aires, Spivacow (ES-PI-VA-COF) marcó la historia de la edición argentina en la segunda mitad del Siglo XX.

El trabajo de Spivacow (ES-PI-VA-COF) es destacado por su reconocimiento del sentido de lo popular y de la función social que podían tener los libros.

También por la democratización de los libros, con ediciones de grandes obras que podían encontrarse en los kioskos de diarios y revistas.

Boris Spivacow (ES-PI-VA-COF) renunció a EUDEBA tras la intervención de la dictadura de Onganía en la UBA, e inició el proyecto del Centro Editor de América Latina junto a otros colaboradores.

En 1969 la dictadura de Onganía aplicó una ley nacional para la represión de actividades comunistas y decidió prohibir la circulación de “Siglo-mundo”, publicación de la editorial.

El trabajo del CEAL estuvo atravesado por un pensamiento progresista, con el eje puesto en las publicaciones de historia y escritores argentinos, y también de los movimientos sociales.

El Centro Editor de América Latina fue sistemáticamente perseguido por las dictaduras militares y en 1974 uno de sus trabajadores, Daniel Luaces, fue secuestrado y asesinado por la Triple A.

El comienzo del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional en marzo de 1976 profundizó la persecución a la editorial, que sufrió un exhaustivo control e incluso la colocación de bombas en sus instalaciones.

En 1978 el Ministerio de Educación publicó una lista de libros prohibidos y en diciembre de ese año las autoridades allanaron y clausuraron los depósitos que el CEAL alquilaba en Avellaneda, además de apresar a catorce trabajadores.

Un informe de inteligencia concluyó que el 30% del material allanado correspondía a “Material cuestionable” por “la difusión de ideologías, doctrinas y sistemas políticos tendientes a derogar los principios sustentados por la constitución argentina”.

El 25 de marzo de 1980 el juez Héctor Gustavo de la Serna dictaminó la quema del material cuestionable, que representaba un millón y medio de libros y fascículos.

24 toneladas de libros fueron trasladadas en dos camiones desde el depósito de la editorial hasta un terreno baldío de la calle Ferré al 1040 (MIL CUARENTA), en Sarandí.

Allí fueron incinerados por la policía bonaerense, en la mayor quema de libros del a historia argentina. 

por Radio Perfil

Galería de imágenes

En esta Nota

Comentarios

Espacio Publicitario

Espacio Publicitario