Friday 26 de April de 2024
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Infierno total: quién le afanó el “orgullo nacional” a Independiente

PODCASTS | Por Edi Zunino | 30 de September 11:55

La puerta de Dante Alighieri al Infierno tiene una famosa inscripción: "Abandona la esperanza si entras aquí". Según las descripciones del propio Dante, el Infierno está compuesto por nueve círculos concéntricos, que se van achicando y enterrando más profundamente en dirección al centro de la Tierra. En ese Infierno de concepción medieval, cada castigo se adapta al pecado del castigado. Los sembradores de discordia son cortados en pedazos. A los traidores se les come la cabeza durante toda la eternidad en homenaje a quien traicionaron.
A Independiente de Avellaneda se lo conoce desde siempre como “Los Diablos Rojos”, pero nunca fue tan parecido a un infierno como en lo que va de este siglo. (Y nada que ver con el parecido del DT, Julio César Falcioni, sobre todo de perfil, con el autor de “La Divina Comedia”). También se le dice “Rey de Copas” a Independiente, por los logros internacionales del siglo pasado, y de ahí mismo viene el cantito en tono combativo de que “será siempre Independiente el orgullo nacional”.

Como hincha de Independiente desde hace 50 años se los digo: todo eso se fue al tacho. Ya no hay metáfora ni poesía épica que valgan. Al “orgullo nacional” se lo afanaron bajo la vieja visera de cemento, que ya no existe más, pero todo el mundo sabía de hace rato quién vendía falopa en plena tribuna y quién mandaba ahí y en alguno que otro amontonamiento te vaciaban los bolsillos, aunque con la habilidad –y la piadosa camaradería- de devolverte el carnet de socio para que sigas yendo a bancar los trapos.

Hoy están declarando los 16 detenidos por el tiroteo del otro día en pleno horario de trabajo y de compras y de escuela en la Avenida Mitre, centro neurálgico de Avellaneda. Están adentro por “disturbios en la vía pública”, por “lesiones” y por “tenencia de armas de guerra”. En la conducción camionera del club, en la oposición del club –que ahora es macrista-, en la Justicia y en la Policía saben perfectamente bien de qué se trata esa violencia y quiénes la ejercen. Saben quiénes son “Loquillo” y “Juani”, los herederos de “Bebote”, que a su vez fue socio y protegido del “Polaco”, el culata en jefe de Hugo Moyano; y saben de memoria quiénes son “Richard” y su casi tocayo “Riki” y “El Viejo Bera” y “Caniche” y “Pablo”, el de los bombos, y “Sting”, que no es ni ahí pariente del célebre autor de la canción de la película “El perfecto asesino”.

No sólo los conocen ahí, del otro lado del Riachuelo. También pesan en las barras de San Telmo y de Dock Sud y de Barracas Central, donde manda otro camionero que, además, es nada menos que pariente político de los Moyano y presidente de la AFA; y los conocen también en Huracán y hasta en River Plate, porque el de las hinchadas es un mundo aparte. Como el de la política, más bien, porque cuando digo que la oposición a los Moyano en Independiente ahora es del PRO, lo digo porque ahí está Christian Ritondo, que tiene lo suyo en Nueva Chicago, y también está otro sindicalista, el gastronómico Luis Barrionuevo, que ya anduvo influyendo en el Rojo en gestiones anteriores, aunque él es de Chacarita. Parece que Patricia Bullrich es el alma mater de ese grupo, que también integra el intendente de Lanús, Néstor Grindetti.

El lío del otro día tuvo que ver con que se estaban revalidando socios para refrescar los padrones, porque en diciembre hay elecciones, y de paso tener los carnets nuevitos, ya que a muchos barras de todas las facciones se los fueron requisando en distintas caídas en cana. Les cabe a casi todos el llamado “derecho de admisión”, pero bueno: este fin de semana no, sino el otro, Independiente va de local y ya puede ingresar público. Así que no se la pensaban perder, sea como sea.

Claro que los opositores culparon a los Moyano por los disturbios. Y claro que la conducción del club sacó un comunicado repudiando la violencia, con los mayores deseos de que la familia de Independiente siga unida en torno a los valores y las glorias de la institución. El fútbol es la dimensión donde, acaso, más nos toma por boludos la misma dirigencia que también conduce gremios, municipios, provincias y hasta el país.

Apostilla final sobre mi carnet de Independiente: lo tiré hace rato a la basura. Tengo mi orgullo.

por Edi Zunino

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