Oriunda de Villa Devoto, su formación deportiva la hizo en River Plate. Con 15 años se convirtió en la jugadora más joven en alcanzar las semifinales de Roland Garros, instancia que repetiría en otras cuatro ocasiones.
Su primer título fue ese mismo año en el Abierto de Japón y continuó en un ascenso vertiginoso que tuvo su punto cúlmine con la conquista del US Open, el 8 de septiembre de 1990. El punto decisivo lo logró con un drive hacia la izquierda de la alemana y la pelota fue tan abierta que generó unos segundos de duda antes del festejo con saltos, emoción y el abrazo con su hermano Osvaldo, su habitual compañero de viajes.
Con Graf, ganadora de 22 títulos de Grand Slam y considerada por muchos especialistas como la mejor de todos los tiempos, protagonizó duelos memorables antes y después de aquella conquista en Flushing Meadows. Gabriela nunca perdió con nadie tantas veces como contra Steffi. Y Steffi nunca perdió con nadie tantas veces como con Gabriela. Fueron 39 partidos, con 28 éxitos contra 11 a favor de la europea. Justamente Graf fue quien la privó de ser número uno del mundo.
Sabatini llegó como tres a la edición de Wimbledon de 1991, arribó a la final y estuvo a dos puntos de quedarse con el título en All England Club y el premio de la cima del ranking, pero terminó cayendo con un inolvidable 6-4, 3-6 y 8-6.
Su último título fue el Masters de 1994 disputado en el Madison Square Garden de Nueva York, torneo que también abrazó en 1988. Obtuvo además la medalla de plata en los juegos olímpicos de Seúl, otro hito inolvidable de su carrera
Tras decaer considerablemente en su juego sorprendió al mundo del tenis al anunciar su retiro profesional luego del US Open de 1996, con 26 años y cuando se ubicaba en el puesto 29. Atrás quedaban 12 años como profesional, 39 títulos, 149 semanas como número tres y un tendal de admiradores a lo largo y a los ancho del planeta.
Guión Cecilia Claps y locución de Pita Fortín.
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