La pareja real había empezado a mostrar fisuras a finales de la década de los ´80, y terminó de resquebrajarse a principios de los ´90. Las infidelidades del heredero al trono ya eran un secreto a voces desde hacía tiempo. La sombra de Camilla Parker Bowles como amante de Carlos se hacía sentir cada vez más, y en 1995 la misma Diana comentó a la BBC que "había demasiada gente en su relación". Además, la princesa reveló su romance con el oficial de caballería James Hewitt.
El texto que el Primer Ministro de Gran Bretaña, John Mayor, leyó ese 9 de diciembre ante la Cámara de los Comunes, rezaba que lo que ocurría entre la pareja no era un divorcio, y aseguró que la decisión se había tomado de manera amistosa. Asimismo, el jefe de estado aseveraba que ambos comparecerían juntos en acontecimientos familiares, cosa que finalmente no ocurrió.
En 1996 el divorcio se volvió un hecho, y Diana perdió su categoría de "Alteza Real", aunque conservó el título de "Princesa de Gales", y con el tiempo ostentó el apodo de "la princesa del pueblo". Anteriormente, Carlos confirmó su romance con Camilla ante la televisión nacional británica el 29 de junio de 1994. Ese hecho terminó de fracturar la difícil relación entre ambos.
El año 1992 fue calificado por la Reina Isabel como un año horrible, en parte por el divorcio de la princesa Ana, por el anuncio de separación de los duques de York y por un incendio que afectó a buena parte del Castillo de Windsor.
Guión de Lucas Boltrino y locución de Pita Fortín.
por Radio Perfil FM 101.9
Galería de imágenes
Comentarios