Termina enero con una inflación del 6%, una tasa de devaluación del 5% y un incremento del dólar informal del 14% posicionándose prácticamente al doble de la inflación.
Esta situación presiona cada vez más los precios del mercado ya que el 6% de inflación se alejó del objetivo que tenía el equipo económico del Gobierno que buscaba comenzar el 2023 con una inflación en torno al 4% para que, en el mes de abril, la inflación se posicionara alrededor del 3%.
Esta inflación es impulsada por el rubro de alimentos que tiene una fuerte incidencia en el nivel general y como resultado de los fuertes aumentos que sufrieron productos como lo es la carne.
Escuchá la columna de Julieta Colella en Radio Perfil F.M 101.9.
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