Gaslighting: abuso emocional sutil

¿Qué es el gaslighting? ¿Cómo darte cuenta si sos víctima o lo estás ejerciendo?

Una forma de manipulación (patrón de abuso emocional) utilizada para hacer que la víctima dude de su propio criterio o percepción. Genera que la víctima se sienta confundida, ansiosa o depresiva.

Si alguna vez te dijeron ante una queja las siguientes frases, presta atención: “eso nunca pasó”, “eres muy sensible”, “fue solo un chiste”, “lo estás imaginando”, “recuerda que yo te lo conté, seguro lo olvidaste”, “estás haciendo un mar de una gota de agua”

Los principales efectos psicológicos del gaslighting a medio y largo plazo, y que llevan a la víctima a asumir que carece de criterio para tomar decisiones por sí misma son:

1. Dudas sobre la capacidad para recordar bien

2. Dudas sobre el propio raciocinio

3. Dudas relacionadas con la propia salud mental

4. Bajada del nivel de autoestima

Cómo darse cuenta del Gaslighting

Algunas señales para saber si estamos siendo "Gaslighteados" (by psicóloga Robin Stern).

• Te cuestionas tus ideas o acciones constantemente.

• Te preguntas si eres demasiado sensible muchas veces al día.

• Siempre te estás disculpando: a tu padres, a la pareja, al jefe.

• Te preguntas por qué no eres feliz, si aparentemente están pasando tantas cosas buenas en tu vida.

• Constantemente ofreces excusas a tus familiares o amigos por el comportamiento de tu pareja.

• Te ves a ti mismo reteniendo u ocultando información para no tener que explicar o dar excusas a parejas o amigos.

• Empiezas a mentir para evitar que te cambien de realidad.

• Te cuesta tomar decisiones, incluso aquellas simples.

• Sientes que no puedes hacer nada bien.

¿Cómo salir del rol de víctima?

Este tipo de abuso es difícil de detectar, precisamente por el nivel de confusión que genera en la víctima.

Requiere de mucha observación y de ganar confianza en ti.

1. Detecta las señales. Reconoce que tienes un problema. Es el primer paso ante cualquier solución.

2. Anímate a comunicarte con libertad. 

3. Trabaja en tu autoestima. 

4. Hazte responsable. No hay un culpable, en cualquier relación ambas partes deben solucionar el problema. 

5. Recupera las relaciones sociales. 

6. Pide ayuda. 

por Paula Cabalén