El poder adquisitivo de los salarios y las jubilaciones se han derrumbado casi un 20% en los tres últimos años. Por lo que uno de los objetivos que el Gobierno Nacional repite desde principio de año, es que los salarios no pueden volver a perder contra la inflación.
Aunque este año todo parece ir en el mismo sentido, desde el Gobierno están tratando de tomar algunas medidas para torcer esa realidad.
Por un lado se encuentra la inflación y jubilaciones. Hasta ahora los primeros cinco meses dan una inflación mayor al 21% mientras que el aumento a los jubilados para los primeros seis meses del año es del 20%. Ante esta realidad, ya estarían perdiendo contra la inflación, porque falta todavía el número de junio. Cabe suponer entonces, que las jubilaciones con respecto a la inflación en los primeros seis meses del año estarían un 3% o 4% por debajo. Es por eso que el Gobierno está evaluando un bono especial para compensar la perdida de las jubilaciones frente a la inflación en estos meses.
Por el otro lado, los salarios frente a la inflación. A principio de año, las primeras paritarias estaban cerrando en torno a un 30% de aumento, ya que el Gobierno planteaba que la inflación durante el 2021 iba a estar en el 29% o 30%. Esas estimaciones ya quedaron atrás, por lo que las paritarias que tienen clausulas de revisión están volviendo a abrir y las que se van cerrando ahora lo hacen en torno al 40%.
Teniendo en cuesta que es un año electoral, el Gobierno apuesta a poder torcer la historia y que esta vez sí los salarios puedan empatarle por lo menos, al aumento de precios.
Por el momento, en los próximos días se va a anunciar un bono a pagar entre julio y agosto para compensar esta perdida del porcentaje frente a la inflación.
por Alejandro Gomel
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