Durante su discurso de asunción frente al Parlamento, el 8 de julio del año anterior, el mandatario ya había dado algunas señales en este sentido al afirmar, entre otras cosas, “no vamos a perder tiempo para concretar la reconciliación de todos los argentinos”.
El 7 de octubre del 89, apenas asumido el cargo de presidente, Menem sancionó los primeros decretos indultando a doscientos veinte militares y setenta civiles. Los beneficiados fueron todos los jefes militares procesados que no habían sido favorecidos por las leyes de “Punto Final” y “Obediencia Debida” y miembros de grupos guerrilleros. También, indultó a los participantes de las rebeliones carapintadas de Semana Santa, Monte Caseros y Villa Martelli; y a Leopoldo Fortunato Galtieri, Jorge Anaya y Basilio Lami Dozo, condenados por delitos cometidos durante la Guerra de las Malvinas. De inmediato, vastos sectores sociales encabezados por organismos de Derechos Humanos expresaron su desacuerdo respecto de los indultos y se realizaron numerosas manifestaciones en todo el país.
El 28 de diciembre de 1990, Menem volvió a firmar una serie de decretos en los que indultó a Jorge Rafael Videla, Emilio Massera, Orlando Agosti, Roberto Viola y Armando Lambruschini, condenados durante el Juicio a las Juntas en 1985. También, contempló a los ex militares Ramón Camps y Guillermo Suárez Mason; al líder de Montoneros, Mario Firmenich y al ex ministro de Economía José Alfredo Martínez de Hoz, entre otros. El 15 de junio de 2006, la Cámara de Casación Penal consideró que los indultos concedidos por el Poder Ejecutivo eran inconstitucionales.
Finalmente, el 31 de agosto de 2010, la Corte Suprema confirmó sentencias de tribunales inferiores ratificando la inconstitucionalidad de la medida tomada por el presidente, por lo que las condenas que habían sido anuladas, debieron ser cumplidas.
Guión de Javier Pasaragua y locución de Pita Fortín.
por Radio Perfil FM 101.9
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